La piel constituye nuestra primera línea de contacto con el exterior. La piel de la cara es más susceptible a los efectos del envejecimiento, como la pérdida de elasticidad, tono y firmeza.
Entender cómo se da el proceso de envejecimiento es fundamental para poder planificar un tratamiento que recupere lo perdido y que brinde un resultado natural.
Diferentes factores contribuyen al envejecimiento global de la cara, entre los que destacan la pérdida de volumen, adelgazamiento de la piel, laxitud de los tejidos de sostén, reabsorción ósea, dando como resultado un descolgamiento de los tejidos.
Parte de la solución es aportar volumen y es aquí donde el ácido hialurónico juega un papel principal como el producto de relleno más seguro y eficaz.
Los rellenos dérmicos son sustancias que se inyectan en la dermis o hipodermis para atenuar defectos como depresiones cutáneas, arrugas, surcos, cicatrices o atrofias de tejido. También permiten el aumento o la remodelación de ciertas zonas faciales como pómulos, mentón, labios, nariz, entre otras.
En la actualidad existen diferentes métodos que ayudan a solucionar cada uno de estos problemas. La transferencia grasa es otro método pero que es quirúrgico.
El ácido hialurónico es el producto estrella para el rejuvenecimiento facial; se utiliza como relleno dérmico por su capacidad para retener líquido y atraer agua, además de estimular la producción de colágeno.
Así, actualmente contamos con una alternativa no quirúrgica basada en la recuperación de los componentes que la piel pierde con los años. Mediante la infiltración de sustancias de relleno como el ácido hialurónico, podemos disimular el envejecimiento cutáneo, de una manera sencilla, obteniendo un espléndido aspecto gracias a la corrección de pequeños defectos.
En cuanto a la técnica de relleno mediante ácido hialurónico para armonización del tercio inferior, es una técnica recomendada para aquellas personas que desean mejorar y recuperar la línea mandibular, sin modificar la expresión y mejorando la piel en general.
El tratamiento consiste en confeccionar historia clínica del paciente, examen físico, valorar si el paciente es candidato para el procedimiento propuesto y muy importante es la elección del producto que vamos a utilizar.
La sesión suele durar entre 40 minutos y una hora.
A saber:
- Es un tratamiento estético no quirúrgico ambulatorio.
- Antes de realizar el tratamiento es importante que la zona a tratar esté totalmente limpia y libre de maquillaje.
- El herpes labial activo es una contraindicación.
- Si está tomando algún tipo de antiagregante plaquetario como la Aspirina, deberá comunicárselo al médico.
- La infiltración se efectúa bajo anestesia local y/o tópica.
- Inmediatamente después del tratamiento, no debe comer hasta que hayan desaparecido totalmente los efectos de la anestesia. Durante los días posteriores, no ingerirá bebidas calientes para evitar la aplicación de calor directamente en la zona tratada.
- Tampoco se depilará con cera caliente el labio superior.
- Deberá utilizar pantalla solar e hidratar la región tratada.
- La inflamación durará aproximadamente 12 hs y los hematomas, en caso de que apareciesen, entre 5- 7 días.